26 noviembre 2019




                    TE ESPERO.



            Ahora, que aún no te has ido, quietos están tus recuerdos. Quietos están ahora en este verano de ilusiones, después de resistir los fríos que agitaban nuestra armonía.

           En este momento, que aún no te has ido, ya echo de menos la fuente de tus labios. Y esa forma de entrega que tanto conozco.

       ¿Cómo llenaré el vacío interminable que me causará tu ausencia, la soledad inmarcesible que cubrirá tus silencios?

          No me queda más que el refugio del tiempo, ese vacío en forma de equipaje que guardaré hasta tu vuelta.

1 comentario:

  1. Muy bonito el poema... No decia palabra,acercaba tan sólo un cuerpo interrogante,porque ignoraba que el deseo es una pregunta cuya respuesta no existe. Luis Cernuda

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