05 octubre 2015

RECUERDOS DE OTOÑO


   Se oye el viento con su nombre entre el espeso mar de cielos grises que presagian una tormenta desencadenada. Ya nada será igual como aquel tiempo de otoño que nos estremeció la piel entre la neblina de hojas cayendo, cuando se gestaba el conjuro de nuestros quiméricos sueños adolescentes. Ni el impreciso lenguaje del silencio saludará las dudas desordenadas de una vida invadida de horas marcadas en el pálido eco de las mañanas. Se fue la magia de aquellos días en que volábamos sobre amaneceres rojos y donde la brisa se dormía en  nuestras manos entre besos de silencio.
   Ha llovido demasiado sobre los corazones para no quedarse sin aliento entre el desconcierto de latidos. Sueña el aire en su vuelo transparente recordándonos lo volátil que es el tiempo. Pasa tenue la luna acariciando el olvido, aquello que dejamos sin acabar.
   Es la hora violenta que todo lo trastoca, la luz en un laberinto divagando por el miedo, la lenta gestación de una herida.


No hay comentarios:

Publicar un comentario